viernes, 5 de octubre de 2007

LAS LUCES DE PARÍS


Uno siempre piensa que estas ciudades famosas que uno veía en la tele cuando era chico son algo inalcanzable, algo tan lejano. Y puede que sea así. Me tocó un camino muy raro en este tramo de mi vida y puedo decir que tuve la suerte de estar ahí y de sentir que no era inalcanzable.

París se despierta temprano para ir a trabajar y se acuesta tarde porque es una ciudad netamente turística. A pesar de eso, a los franceses no les gusta mucho la idea de tener que explicar cosas en inglés, son demasiado franceses en ese sentido. Quizás tambien estén hartos de que todos los días cientos, miles de personas distintas vengan a preguntar cómo se hace para subir a la torre Eiffel.
Mucho arte, mucha poesía dibujada hasta en los techos de las casas, hacen de la ciudad la mejor de las postales. Tienen con qué inspirarse los excelentes dibujantes de la plaza, pero eso sí, si quieres un retrato de tu chica tienes que pagar no menos de 40 euros.

El euro aquí es prácticamente un saludo : todo se paga y todo es más caro de lo normal. Una cerveza en la noche parisina cotiza 8 euros y no llega ni mintiendo a ser un litro. Un sandwich común y corriente no costará menos de 3,50 o 4 euros. Subirse hasta la punta de la torre Eiffel obliga a erogar 11 euros, mientras que para subir a la cima del arco del triunfo, “sólo” serán 8.
Pero ojo, no todo es tan claro en la “ciudad luz”: muchos vagabundos están tirados en la calle cada día. Han sido completamente despojados de la sociedad, no están ni registrados como ciudadanos, no tienen ayuda ni del Estado ni de nadie. Sólo piden monedas cada día en la estación del subte y sufren una agonía que estoy seguro que debe ser desesperante.

Hay barrios también no tan alejados del centro de París que se parecen más a un mercado negro que a un barrio. Timadores de juego, vendedores de cigarrillos, locos, ruidosos, ladrones... Todos ellos deambulan por las calles sin ningún sentido real. Están tratando de hacer negocios raros, revendiendo cosas. Ahí la policía no está y también la suciedad y el desorden se hacen notar.
Mas abajo, el servicio de metro subterráneo es muy eficiente; sólo deberás sufrir un poco el calor y los olores en algunos horarios donde mucha gente los está utilizando. Es bastante simple poder movilizarse dentro de la ciudad con este sistema, siempre cuando tengas un mapa a mano y leas atentamente los carteles. Cada viaje tiene un costo de 1,20 euro y el abono para turistas para usarlo por 5 días todos los viajes que quieras y también válido para colectivos, tiene un costo de 27,50 euros.

París eyacula a las 20hs cuando cientos de luces hacen un show a lo largo de toda la torre Eiffel. El “orgasmo” dura 10 minutos y recibe la atención de cualquier persona, hasta del que ya lo vio cientos de veces. El templo de Notre Dame se enorgullece de tanta belleza e historia, mientras abajo los barcos te esperan para llevarte a hacer un citytour plagado de historias y paisajes.
Quizás quieras ir por la tarde al museo de cera o al de ciencia y tecnología. Por la noche puedes ir a cenar alguna especialidad local y luego descubrir el mítico Moulin Rouge o simplemente contemplar las estrellas en el cielo. La diversidad del vivir, de eso se tratan las luces de París...

2 comentarios:

Juan dijo...

buenas letras...

quizas el que mas me llego fue "solo un momento"

ese me ha identificado...

un abrazo y que las letras sigan fluyendo!

Anónimo dijo...

Sentite asquerosamente envidiado.

espero que es estes disfrutando mucho todo eso.

Los espero el 15 de marzo...

NO FALTES!!! (como tarjetita de cumpleaños de 9 años)

fer