Cuando uno ingresa por primera vez a la ciudad, respira un aire de tranquilidad y de belleza pocas veces antes experimentado. Situada en la región bávara de Alemania, Bamberg te invita a descubrir toda su historia y aquellos paisajes que son envidiados por los miles de visitantes que llegan a la ciudad en cualquier época del año.
La historia dice que durante los siglos posteriores al imperio de Roma, la migración germana llegó a la Diócesis de Bamberg, la cual estaba habitada por los Eslavos. El asentamiento fue mencionado por primera vez en el año 902, debido a la construcción del Castillo de Babenberg, en honor a la familia que lo construyó. El área fue evangelizada por los monjes de la Orden Benedictina, y fue entregada a la Diócesis de Würzburg.
El conjunto de la ciudad de Bamberg, fue declarado como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco (Organizacion Educacional, Cientifica y Cultural de las Naciones Unidas) en el año 1993, abarcando un área protegida de 142 ha y una zona de respeto de 444 ha.
Dentro de este partimonio se puede encontrar:
+La Catedral (1237), con los restos de los reyes Enrique II y el Papa Clemente II
+La Residencia Antigua (Alte Hofhaltung), residencia de los obispos entre el siglo XVI y siglo XVII
+La Residencia Nueva (Neue Residenz), residencia de los obispos después del siglo XVII
+El Ayuntamiento Antiguo (Altes Rathaus, 1386), construido en una isla en el centro del río Regnitz
La cerveza como palabra mayor
Un dato muy interesante que nos ofrece la escenografía del lugar es que la cantidad de habitantes no asciende a mucho más que 70000 personas, sin embargo, funcionan aquí de manera activa unas 20 cervecerías ó fábricas de cerveza. Probablemente sea en esta zona en donde se pueda llegar a probar la mejor cerveza del mundo.
La cultura de los Jardines de Cerveza es también aquí algo muy importante para la comunión de la sociedad en las estaciones de primavera y verano. Debido quizás al lugar no tan conocido comercialmente ó tal vez también a la gran demanda de cerveza que existe en la zona, un jarro espumoso no costará más de 2,30 ó 2,50 euros, como mucho. Muy distinto al precio que se puede llegar a pagar en ciudades netamente turísticas como Múnich ó Freiburg en donde los precios varían entre 3,40 y 4 euros, siempre contando a la cerveza en vasos de medio litro.
Es muy frecuente al conocer gente en Bamberg, que una vez que puedas acceder a las casas de las personas, siempre te ofrezcan una cerveza. Naturalmente, casi todas las familias consumen cerveza aquí como si fuese mate ó tereré, siempre con mucho cuidado y en dosis muy moderadas. Obviamente, comprarla en grandes cantidades en el supermercado, resulta mucho más económico que hacerlo en los Biergarten ó en cualquier bar.
Prohibido venir sin cámara de fotos
Más allá de su historia y de los diferentes tipos de cerveza que puedas llegar a probar aquí, existen también paseos obligados por los cuáles no puedes seguir de largo en tu ruta:
-El centro histórico: casi completamente de piedra, el paseo por las peatonales te hará disfrutar de la mixtura perfecta entre lo antiguo y lo moderno con un toque especial de magia. Llegarás a un puente en donde se encuentran los edificios de la Municipalidad, pero verás que abajo corre mucha agua y la corriente servirá para que los deportistas que practican canotaje, te den un show en vivo sin que lo hayas pedido.
-El jardín de rosas: se recomienda poder visitar la ciudad en épocas en donde el sol diga presente, ya que el jardín mostrará toda su belleza con sus colores y fuentes y la posibilidad de subir a un mirador para observar la ciudad a través de un telescopio.
-Las 7 colinas: Bamberg es también conocida como la ciudad de las siete colinas, ya que tiene efectivamente esa cantidad de niveles de altura y lo curioso es que sobre cada colina hay una iglesia, una más linda que la otra. Se destacan la Catedral Central de Bamberg y la Iglesia Saint Michel.
-Schloss Seehof: unos veinte minutos más lejos del centro de la ciudad, no puedes dejar de visitar este maravilloso palacio que data aproximadamente del año 1410 y ofrece una postal imponente. Puedes realizar una excursíon por dentro del palacio y afuera en verano a determinadas horas se ofrece un show con agua y luces. Muchas parejas que se casan, vienen a hacer sus fotos de la boda aquí y además pueden realizar el festejo en un restorán que ofrece ese servicio, al estar ubicado muy cerca de esta maravillosa construcción.
Si bien es cierto que es un lugar ideal para poder envejecer en paz, es una parada interesantísima para que cuando uno sea viejo en otro lugar del mundo, pueda recordar con frescura la visita a esta antiquísima y bella ciudad.